los nuevos vengadores - ¿quien es el vigía?

 los nuevos vengadores, ¿quien es el vigía?
Bryan Michael Bendis,  David Finch, Steve Mcniven

que quien es el vigia??... *escupe en el suelo* fácil, es el mamonazo que se ha cargao a Matanza. la verdad, creo que este superheroe ya estaba bastante estigmado para mi, para mas inri, en su origen adoptan fórmulas de Supreme o Miracleman y que quieres que te diga, esto acaba de sepultar al personaje del vigía hacia el fondo de mi escala superheroica, que ya esta baja de por si.
bueno este tomo continua al anterior cuya reseña esta publicada ahi abajo y si me lo he leído, tan solo ha sido por que lo cogí de la biblioteca junto al otro para intentar liberar a los chavalines a los que hago clases los viernes de la Tirania pokemon y intentar que le pillen algun tipo de afición al comic que no este protagonizado por peluches.
en este tomo Bendis sigue decepcionandome de la misma manera que lo hacía en el tomo anterior, pero además para mas inri, haciendo alusión a una obra como Supreme. esto me da mucha rábia, por que me da la sensación de que no es un guiño ni un homenaje, ya que supreme es una obra desconocida para el gran público editada por la ya extinta image y esta historia esta publicada en una serie principal de marvel y no se hace ningun tipo de reseña a esta.
por el tema del dibujante, Finch es sustituido por mcNiven que a mi juicio la caga menos, aunque abusda de la doble pagina para distribuir las viñetas (la verdad no se si es el o bendis) pero todos sabemos lo incomodo que es que haya una viñeta partida por la mitad y tener que abrir el tomo hasta dejarlo totalmente plano, para poder apreciar la viñeta... jodér, la sangría se inventó para algo, no?.

en este tomo se nos habla del Vigía, un superheroe con toda clase de superpoderes, tanto capaz de alterar la realidad por medio de su telepatia, como "con la fuerza de mil soles" de hecho todo es una búsqueda a metdodo de regresión. ya que le habian anulado telepaticamente para que el se anulase a el mismo... un rollo un tanto Jodorowskiano que la verdad, no convence demasiado.

veredicto: pasatardes